Patek Philippe para hombre
Patek Philippe ha apoyado la relojería tradicional de Ginebra desde 1839. Cada pieza se elabora a mano con la máxima precisión, tardando un mínimo de nueve meses en completarse. Los relojes de Calatrava, que datan de los años 50, y el Nautilus de Patek Philippe, reconocido por su cara octogonal redonda y por ser uno de los mejor construidos del mundo, serán, definitivamente, reliquias en el futuro.