Es un hecho previsible, la llegada del otoño hace que nos replanteemos nuestro armario de entretiempo y las prendas a las que recurrimos a diario para ir al trabajo. Qué ponerse para ir a la oficina sigue siendo un dilema en cualquier época del año pero el efecto rentrée amplifica nuestros quebraderos de cabeza con un cambio de marcha del verano a “no verano” y el factor añadido de todas las tendencias nuevas trae el mes de septiembre. Esta temporada no podemos obviar otra de las corrientes que más están influyendo en nuestro armario cotidiano: las prendas de inspiración deportiva o ‘streetwear’. La moda urbana comienza a infiltrarse también en nuestro repertorio de prendas para la oficina y si hace unos años era impensable presentarse a una reunión en deportivas, ahora ya no le es. El código de vestir laboral evoluciona hacia prendas mucho más cómodas y desenfadadas, una tendencia.
Selección: Zapatillas de Off-White y zapatillas de velcro de Stella McCartney
Unas zapas distentidas
El truco está en llevarlas con un alguna prenda estilo sastre en vez de combinarlas con vaqueros como harías durante el fin de semana. Elige un modelo en el que predomine el blanco, aunque solo sea en la suela, igual que en las tradicionales bambas de tenis que, ya de por sí, tienen un aire moderno y clásico.
Selección: Sudadera gris de Golden Gose y sudadera oversize de Gucci
Sudaderas con slogan
Llévala durante los meses de otoño igual que llevarías un jersey de punto en invierno. Funcionan tanto con una falda por media pierna y un zapato plano, como con un pantalón de traje y unos botines con un poco de tacón. Si prefieres darle un toque más clásico para ir a la oficina, añádele una camisa blanca por debajo para que se vea el cuello.
Selección: Bolso de Marc Jacobs y bolso de Carmina Campus
Bolso sporty
Los accesorios tampoco iban a quedarse indiferentes a la moda de las prendas ‘sporty’. Ya era algo previsible desde el éxito masivo de las mochilas y ahora, además, se llevan los bolsos de inspiración deportiva. Apuesta por un bolso estilo mensajero con bandolera o por un ‘tote’ grande con asas y múltiples compartimento de estilo utilitario, otra de las tendencias claves de la temporada que también es perfecta para ir a la oficina.
Selección: Joggers azules de Moncler y joggers con mensaje en los laterales de Dsquared2
El pantalón estilo ‘jogger’
Si lo pensamos con un poco de detenimiento, no es mucha la distancia que separa al típico pantalón de traje del pantalón ‘jogger’ o, digámoslo sin miedo: el pantalón de chándal. Si alguna vez te has preguntado de dónde viene esta palabra tan denostada, su origen está en el vocablo francés "chandail", abreviatura coloquial de "marchand d'ail". O sea, era la indumentaria que llevaban los vendedores de ajos del París de finales del siglo XIX. Fascinante, ¿no? Apuesta por un modelo recto, con gráficos en los laterales que puedes combinar con una sandalia de plataforma o por un pantalón fluido estilo bombacho recogido en la parte del tobillo, también van a verse mucho esta temporada.
Selección: Cortavientos estilo militar de Theory y cortavientos de P.E.. Nation
El cortavientos o chaqueta ligera
Otra prenda que puede parecer demasiado ‘casual’ para que nos tomen en serio en la oficina pero que, decididamente, no lo es. Piensa en ella como si fuera una especie de gabardina mini que puedes ponerte sobre una camisa o un jersey fino. Quedan perfectas con un pantalón masculino. ¿Las claves para acertar? Elige una que tenga cuello alto, cremallera o cualquier otro detalle utilitario como los bolsillos plastrón o paneles combinados de tonos diferentes.
Selección: Plumas de Ecoalf y plumas de Moorer
El eterno plumas
Quizás no sea noticia, ya sabemos que las prendas acolchadas son muy ponibles y fáciles de combinar, llevamos varias temporadas viéndolas por todas partes, pero este año la clave consiste en apostar por un plumas que sea claramente deportivo. En otras palabras, hacer caso omiso de todas esas prendas de líneas limpias y neutras que intentan ir a una versión más clásica del plumas y elegir un chaquetón que sea abiertamente ‘sporty’.