Texto original de Gabrielle Carrera
Traducción y localización de Isabel Da Cunha Ventura
Supreme es un proyecto nacido en Nueva York hace poco más de 25 años que inició como una tienda especializada en patinetas y cultura urbana. Poco a poco, la marca comenzó a ganar protagonismo en el escenario principal de la moda, siendo objeto del deseo de los jóvenes más estilosos del mundo. ¿El detalle único? Sus inesperados lanzamientos y con poco stock hacen que sus artículos sean muy deseados y, claro, coleccionables.
ALIANZAS PODEROSAS
Marcas como Nike, Vans, The North Face y la firma japonesa Comme des Garçons ya crearon modelos en asociación con Supreme. Sin embargo, el gran salto a la fama de la marca sucedió luego de su trabajo junto con Louis Vuitton, logrando una combinación de lujo y estilo casual perfecto.
La colección tenía el logotipo icónico de LV con el color distintivo de Supreme, convirtiendo cualquier prenda de esta sociedad en uno de los artículos más deseados del siglo.
Un detalle importante que debemos destacar: el logotipo de Supreme está inspirado en el trabajo de la artista Barbara Kruger, conocida por sus collages que se apropian de anuncios publicitarios, dándoles una nueva connotación que habla de construcciones sociales, sexualidad e identidad.
PLAYERAS ILUSTRADAS
Además de sus trabajos junto con otras marcas, Supreme también usa imágenes de celebridades para transformar sus playeras. No hay nada simple, su lista incluye los mejores artistas, que van desde grandes nombres de la música hasta dibujos infantiles: Lou Reed, Kate Moss, Neil Young, Morrissey, Raekwon, Mike Tyson y Kermit –la rana Muppet.
COMPRA EL LOOK
Playera Gucci Mane / Playera Nasty Nas / Playera Morrissey
ÉXITO TOTAL
James Jebbia ya dijo que no invertirá en publicidad…y tiene razón. El poder de Supreme proviene del método boca a boca y, principalmente, a través de su atractivo nostálgico.
La selección de Jebbia fue asertiva: las tablas de surf firmadas por reconocidos artistas visuales, las asociaciones con los mejores diseñadores, marcas como Louis Vuitton y una producción a pequeña escala, le dieron a la marca el impulso que necesitaba para convertirse en un referente de lujo.